lunes, 23 de noviembre de 2009

Desde el Gobierno se brindaron las herramientas necesarias para evacuar la hacienda de islas

Tal como se había pronosticado, el río Paraná está experimentando una fuerte crecida a más de dos meses de que se hayan comenzado las acciones preventivas desarrolladas por el Gobierno provincial y vinculadas a la ganadería en islas y zonas bajas de la cuenca del Paraná. Precisamente desde la Secretaría de la Producción se comenzó una tarea de prevención desde la segunda quincena de septiembre, en una acción conjunta con los intendentes y productores.

El objetivo inicial de la acción estatal fue comunicar el alerta en forma preventiva y sugerir el retiro de hacienda de las islas y campos bajos, convocando, inclusive, a funcionarios del Instituto Nacional del Agua para que informen sobre la situación hidrológica directamente en territorio.
En el marco de las acciones directas, el Estado provincial –con aportes de la Nación– hizo una provisión de corrales móviles a los municipios de Villa Paranacito, Ibicuy, Ceibas, Gualeguay, Victoria, Diamante, La Paz y Santa Elena. El objeto de la infraestructura provista es la de facilitar el movimiento de la hacienda retirada de la isla en el marco del avance del agua.
Productores conformes
“Dirigentes de la Federación Agraria, como el mismo Alfredo De Angeli, admitieron que el Gobierno entrerriano dio respuesta y asumió una tarea preventiva frente a la posibilidad de una inundación que ha comenzado a hacerse evidente en las últimas horas”, destacó el secretario de la Producción, Roberto Schunk.
Entre otras acciones encaradas por la Provincia –además de la tarea preventiva y la provisión de corrales– se cuenta el acuerdo con el Ejército Argentino para poner a disposición de los productores dos balsas con una capacidad de traslado de 400 a 450 cabezas cada una. Los costos que demandaron ese operativo fueron asumidos por el Gobierno provincial. Las balsas se destinaron originalmente para utilizarse en Diamante y Gualeguay, pero quedando además la posibilidad de traslado a otras localidades.
Se estableció un grupo de coordinación tanto a nivel interno de la Secretaría de la Producción por los problemas de la hacienda, como a nivel más general mediante el Ministerio de Gobierno. Esto incluye todos los actores institucionales relevantes: Senasa, Prefectura, Policía, intendentes, entre otros. De igual manera se establecieron, en diversos lugares, comisiones locales para el tratamiento de los problemas que se generen en el proceso de evacuación.
Además, desde la Secretaría de la Producción se viene gestionando la agilización de los trámites de la exportación del ganado gordo que estaba en las islas, así como la prioridad de pago a los feed lot de las zonas para permitir su plena utilización. Asimismo, se efectivizó la instrumentación de un seguro para barcazas y carga, que ya está vigente a través del Instituto Autárquico Provincial del Seguro (IAPS).
Por su parte, Vialidad provincial se ha puesto a disposición y ha realizado diversos trabajos requeridos por los intendentes, al tiempo que se están gestionando obras de limpieza de arroyos y otras relacionadas para mejorar las condiciones de desagüe.
Desaceleración y pedido
La evacuación de ganado se hizo en forma coordinada. No obstante, el director de Ganadería de Entre Ríos, Edgardo Churruarín, destacó que “en diversas zonas de campos bajos los productores habían desacelerado la evacuación cuando advirtieron, hace poco más de una semana, un detenimiento de las lluvias y una estabilización hidrológica del río en el territorio entrerriano”. “No obstante –continuó el funcionario–, desde el Gobierno se hizo hincapié en que no había que confiarse y que se debía continuar con la tarea de retiro de hacienda. En esto fuimos claros y dejamos toda la infraestructura a disposición de ese cometido”, señaló.
Churruarín destacó, no obstante, el ordenamiento y la coordinación en el traslado de hacienda y en ese punto precisó que los productores “han respondido bien en función de descargar las islas y sacar las categorías más vulnerables”. Lo que ha salido primero ha sido la hacienda gorda para faena y la hacienda de cría. Y lo que se dejó para después es la invernada de novillo, que tienen mayor fortaleza.

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